Comprueba se eres adicto a tu <<Smartphone>>... y superalo

2015
Comprueba se eres adicto a tu <<Smartphone>>... y superalo
     

¿Alguna vez ha contabilizado las veces que mira la pantalla de su «smartphone» a lo largo del día? Haga la prueba y puede que el resultado le sorprenda. Además, probablemente le interese saber que, a día de hoy, un 77% de las personas que posee un teléfono inteligente padece «nomofobia» o, lo que es lo mismo, temor y ansiedad ante el hecho de no poder consultar su «smartphone» cada vez que lo desea.

Así lo aseguran, al menos, desde «Desconect@», un programa psicoeducativo que persigue conseguir un uso responsable de la tecnología entre la población española, sobre todo por parte de los más jóvenes. Como informa «Desconect@», además, España es el país europeo con mayor adicción adolescente a internet — el 21,3% de nuestros jóvenes está «enganchado» a la Red frente a la media del 12,7% del resto de la UE —, un dato que no debería pasar desapercibido, mucho menos para los padres.

Pero el problema no es evidente solo entre los adolescentes. La irrupción de las nuevas tecnologías en nuestra rutina diaria ha traido consigo no solo grandes beneficios, sino también graves inconvenientes que en ningún caso han de tomarse a la ligera. Cada vez son más los españoles que descuidan sus tareas en el ámbito laboral y cuyas relaciones sentimentales han terminado por verse afectadas debido a una excesiva dependencia del teléfono móvil.

Existe, por ejemplo, lo que se conoce como el «síndrome del doble check» —ansiedad producida al mandar un mensaje a nuestra pareja y comprobar que no nos contesta— y que puede convertir a herramientas como WhatsApp, en teoría ideadas para facilitar nuestra la vida, en un arma de doble filo que puede, incluso, dilapidar nuestro futuro sentimental.

Marc Masip, psicólogo experto en adicción a la tecnología y director de «Desconect@» y Nacho Giner, director de iBoo Mobile, son los responsables «FaceUp», una aplicación cuyo objetivo no es otro que el de frenar ese creciente enganche a internet tan común entre la población española así como poner coto a la «nomofobia», un problema real y respecto al cual, en palabras de Masip y Giner, deberíamos comenzar a tomar medidas más pronto que tarde.

«Decimos que alguien es adicto al 'smartphone' cuando el uso del teléfono termina afectando a su vida personal o profesional», cuenta Masip, ducho en este tipo de adicciones y que ha lidiado con casos ciertamente preocupantes, como el de una mujer que se despertaba una hora antes cada día para jugar con su teléfono móvil y que, debido a su extrema adicción, solía llegar tarde al trabajo con frecuencia hasta que fue despedida. «Este es un caso real —dice Masip— y podría contar otros muchos. El problema es muy serio y que la sociedad debería conocer en profundidad».

La «nomofobia», dicen ambos expertos, puede llegar a ser tan dañina y adictiva como lo son el alcohol o el tabaco. «Si te tomas una cerveza al día no tienes por qué ser alcohólico, pero si no puedes pasar un día sin esa cerveza es posible que tengas un problema. Esto es, exactamente, lo que sucede con las nuevas tecnologías», señala Marc Masip. Como también ocurre con otro tipo de adictos, es muy habitual que quien sufra «nomofobia» jamás se haya percatado de su problema por lo que, en la mayoría de ocasiones, deberá ser una tercera persona la que decida dar la voz de alarma y frenar esa adicción si considera que está tomando tintes serios. «FaceUp», explican sus creadores, «tiene el objetivo de convertirse en esa tercera persona y activar las alertas en caso de que se detecte un problema de adicción preocupante».
Cómo funciona

El mecanismo que utiliza «FaceUp» para atajar la adicción a internet es sencillo. Lo primero que haremos tras descargar la aplicación será pasar un completo test que medirá nuestro nivel de «enganche» y nos dirá, sin tapujos, en qué grado nuestra vida está ligada al «smartphone». Una vez conozcamos nuestro nivel de adicción, la propia aplicación nos propondrá retos para superar el problema y, además, nos proporcionará las herramientas conseguirlo. «Una de las cosas que podemos hacer, explican los creadores de «FaceUp», es poner el teléfono en modo 'love' para evitar interrupciones indeseadas durante un tiempo limitado».
Comprueba si eres adicto al «smartphone»... y supéralo
Los creadores de «FaceUp»

Del mismo modo, continúa el director de iBoo.com, «'FaceUp' nos recordará cada mañana la conveniencia de dedicar unos minutos a la reflexión cuando nos encontremos en el trabajo. Muchas veces, el hecho de permanecer constantemente conectados al e-mail o al teléfono nos quita tiempo para, por ejemplo, elaborar estrategias de cara a la empresa o proponer soluciones para un problema determinado.

Además, la tecnología —prosigue el experto— no solo debe mantenernos siempre conectados sino también proporcionarnos la oportunidad de reafirmar ciertos valores como el silencio, la conversación, la reflexión...». A medida que vayamos superando los retos que «FaceUp» nos propone, el nivel de adicción al «smartphone» irá bajando y el usario será consciente del impacto que este menor enganche tiene en distintos aspectos de su vida, explica.

Los adolescentes son, se reafirma Masip, el blanco más fácil para la «nomofobia». De hecho, el experto considera que un adolescente no debería tener un teléfono móvil conectado internet hasta haber cumplido los 16 años. «Los padres tienen mejores maneras para controlar a sus hijos y, de hecho, pueden sentirse más que seguros si su hijo tiene un teléfono convencional y sin conexión a internet. Lo único que hace el 'smartphone' es abrir las puertas a otros vicios innecesarios».
Que tu móvil no te domine

Para Nacho Giner, es preciso distinguir entre tres tipos de usuarios de «smartphone». «Está, en primer lugar, el que domina su terminal para beneficiarse de él y hacer un buen uso. Después, tenemos al usuario que está enganchado aunque no sabe que tiene una adicción y, por último, está quien se sabe adicto a internet pero no está interesado en cambiarlo». En «FaceUp», apunta Giner, «no solo alertamos al usuario de su problema sino que además le ofrecemos los pasos para atajarlo, proponiéndole retos y dándole cada día píldoras de información para que tome conciencia de lo peligroso que puede ser su enganche a la tecnología. Nuestra idea es ayudar y proponer un nuevo estilo de vida dando al cliente una visión real de su situación».

¿No es, no en vano, extraño que se busque atajar la adicción a la tecnología utilizando como herramienta un «smartphone»? No para los creadores de «FaceUp» que, en respuesta a esta misma pregunta, son claros al asegurar que «si el problema está en el 'smartphone' no queda más remedio que utilizarlo para acabar con él actuando desde dentro». Giner, además, no duda en comparar la «nomofobia» con la adicción del tabaco y pone como ejemplo los mensajes de concienciación social que el ministerio de Sanidad imprime en las cajetillas. «Nosotros no fomentamos un uso limitado del móvil, solo queremos enseñar a utilizarlo bien y así lo dice nuestro mensaje: que el móvil no te domine, domínale tú a él».