La Oficial Mayor del Gobierno de Sonora, Elia Sallard, ya enfrenta su primer conflicto de intereses… con su marido. Resulta que su esposo, Felipe Chacón, director de Relaciones Públicas y Eventos Especiales en el gobierno padrecista aún sigue cobrando en esa dependencia, lo cual, obviamente, genera molestias al actual titular, Germán Robles, quien no puede hacer uso de esa plaza de director general.

Reportan que Felipe Chacón se siente intocable por la chamba que Ricardo Mazón le consiguió a su esposa para que le cuidara sus intereses dentro del gobierno estatal.

Elia Sallard, quien tiene años trabajando con Ricardo Mazón, fue ampliamente recomendada para ser funcionaria en el gobierno de Claudia Pavlovich. Elia era secretaria y luego ocupó labores administrativas en la oficina de Ricardo Mazón.

Y en cuanto a Felipe Chacón empezó en el gobierno de Eduardo Bours como una especie de “valet” de Kitty Gutiérrez Mazón en Relaciones Públicas. Era el encargado de las fiestas de Acción de Gracias de la familia Gutiérrez, con funciones de logística de los viajes que Kitty y familia realizaban a Phoenix y Tucson.

Ya con los azules, Chacón hizo click con gente importante y le dieron el puesto de director de Giras y luego ascendió a director general de Relaciones Públicas. Fue un funcionaria de todas las confianzas de la oficina del gobernador y de la Secretaría de Gobierno. Esta confianza le sirvió para comisionar gente al DIF para que ayudaran en sus giras a la Primera Dama y fueran cómplices en varios asuntos.

A Felipe siempre se le ha visto tranquilo. Sabía que si ganaba el PAN seguiría en su puesto, como hombre de confianza del padrecismo. Y si triunfaba el PRI haría valer sus derechos por su esposa y Ricardo Mazón. Siempre ha dicho que él es el poder real. Es uno de los funcionarios de buen nivel que tiene a su esposa con nivel de secretario y a su vez en lo personal cobra como director general. Pero ahora pretende cerrar la pinza con un nuevo negocio: Ser proveedor del gobierno estatal. Venderle al gobierno, utilizando a los contactos adecuados, es siempre garantía de negocio redondo.

Ya es un secreto a voces que Germán Robles, pese a su cercanía con la gobernadora, quiso hacer una limpia en la coordinación que le dieron y nomás no pudo. Empezaría con Felipe Chacón y topó con pared. En ese changarro se defienden diciendo que son muy “institucionales”. Pero son muy serviles con los que llegan. Así ha sido con personajes que han llegado a ese espacio, como Samuel Moreno, “El Mocho” Villaescuza y su yerno Beto Véjar.

Y ahora con Felipe Chacón, de bajo perfil pero que es la envidia de muchos.

Así que deben recomendar a la recomendada de Mazón a que recomiende a su marido a dejar ya el cheque verde, porque siempre estará muy vigilado.

Ahora entendemos por qué hay filtraciones en Oficialía Mayor. La escoba no ha llegado. Y así como están las cosas, ni llegará.

En un descuido desaparecen esa dependencia.

Así era el plan original de Claudia.

Quizá aún lo sea.

Ya veremos.