El Presidente Municipal de Hermosillo, Manuel Ignacio Maloro Acosta, olvidándose del golpe certero que acaba de dar a las familias hermosillenses presume de supuestas inversiones en obras de beneficio comunitario, ante cientos de acarreados.

Para él, según sus propias palabras “Esto es el lanzamiento de una nueva forma de gobernar”, mandando al diablo el descontento popular ocasionado por la medida de aumentar la tarifa del agua por supuestos quebrantos realizados por la anterior administración, pero ¿qué culpa tiene el pueblo??

Importándole poco la necesidad de sumarse a la "Austeridad promovida por Pavlovich hizo un derroche de recursos celebrando dicho evento en en campos deportivos del sector de La Sauceda, donde se vio el tan aborrecido acarreo de gentes para llenar dicho evento.

En su participación, Maloro Acosta dijo que “De lo que se trata es de que le vaya bien a Hermosillo, de lo que se trata es de que le vaya bien a Sonora”, a lo cual los cientos de acarreados aplaudieron, será que dichos acarreados serán becados en sus recibos del agua???.

Eso si pidió con todo el descaro del mundo que hagan equipo con el, como si el jalara con la raza de a pie, quienes los últimos días de la quincena andan pidiendo prestado para el multirrutas para poder transportarse a su trabajo, eso mantiene a más del 70% de la ciudadanía molesta por haber elegido a un presidente insensible y corrupto, quien lejos de atender a sus gobernados hace eventos con cientos de acarreados.

Para esos hermosillenses, que se sienten burlados, ofendidos, e impotentes por las primeras acciones de gobierno del Maloro, dicho sea que son por demás nocivas para sus gobernados, para ellos no habrá torta ni frutsi que los libere de la frustración y el trauma de haber votado a su favor y que ahora en el poder les de un patín en el trasero, eso si sus medios pagados lo aplauden por todo

Valla falta de respeto del Maloro hacia la ciudadanía, a quienes al meterle de a huevo el megaaumento a la tarifa del agua se dice ser muy responsable y no buscar el aplauso, mientras que con eventos como el de ayer, con cientos de acarreados que fueron financiados con nuestros impuestos si pide el aplauso, pero todo en la vida se paga y su carrera política se verá truncada por su insensibilidad mostrada en su desastrosa administración.