Una cirugía plástica con parafina y aceite de automóvil tiene a Priscila, de 23 años, al borde de la muerte. Ella se encuentra hospitalizada desde hace mes y medio, acudió al médico tras ver su cuerpo amoratado.

2015
Mujer al borde de la muerte por ‘cirugía plástica’ con parafina y aceite de carro
     

Priscila, una mujer de 23 años al borde de la muerte por "cirugía plástica" (Especial)

Una joven de 23 años de edad fue con un supuesto cirujano plástico que inyectó parafina y aceite para automóvil.

SONORA (La Silla Rota).- Una cirugía plástica con parafina y aceite de automóvil tiene a Priscila, de 23 años, al borde de la muerte. Ella se encuentra hospitalizada desde hace mes y medio, acudió al médico tras ver su cuerpo amoratado.

Su madre, María García, es enfermera, relata que el 16 de junio, cuando vio las piernas de su hija, mientras se cambiaba, le pareció extraño observar un color morado casi negro en sus muslos, pensó era gangrena y decidió llevársela al Hospital General del Estado (HGES).
Al llegar, los doctores le informaron que la mala práctica médica hecha por un supuesto cirujano plástico es la consecuencia de su malestar, en ese momento  Priscila ya registraba fiebre.
Revela que tras realizarse estudios, los médicos le informaron que su hija fue inyectada con parafina, es un hidrocarburo líquido combustible que se extrae principalmente del petróleo crudo y también con aceite de automóvil.
“Yo le vi negras las piernas, me dijo, “mamá me siento tan mal… Fue un travesti que le dicen La Sugehy pero no sé cómo se llama”… Y que le dijeron que ese fulano ya se fue al otro lado (Estados Unidos). No sé por qué se hizo eso, no lo necesitaba, pero ella me dijo que se miraba flaquita y quería volumen, eso dijo”, cuenta la madre.
La práctica fue hecha en el municipio fronterizo de Nogales, porque un amigo le recomendó que acudiera con ese supuesto cirujano plástico, agrega la madre que su hija aceptó, pero a los días, cuando regresó a Hermosillo comenzó a sentirse mal.
Mary García, dice que es atendida en el Hospital General, pero requiere de apoyo porque el tratamiento para retirar esa sustancia es costoso, se trata de un sistema VAC, esponjas que absorben esos aceites del cuerpo, que deben colocarse cada cuatro días y la aplicación cuesta 20 mil pesos.
Reitera que pide apoyo, para salvar la vida de su hija, quien es madre soltera de dos varones de cuatro y dos años, que se encuentran a su cuidado y del abuelo.
La madre prefirió no otorgar más datos personales de su hija para conservar un poco su privacidad, pero quiso evidenciar el caso también para dar a conocer que existen “charlatanes” que dicen ser cirujanos plásticos.

Leticia Cuesta/ La Silla Rota