Con Vicente Fox se ofreció un cambio en la vida del país que no se cumplió. Hoy Andrés Manuel López Obrador prometió lo mismo. Esperemos que cumpla su promesa a partir del 1 de diciembre. La excusa de Fox fue que la cobija no alcanzaba a tapar por completo. Se jalaba de un lado y se descobijaba de otro. O sea el presupuesto era insuficiente.

2018
Bisturí. Sonora en el nuevo México de AMLO
     

Con Vicente Fox se ofreció un cambio en la vida del país que no se cumplió. Hoy Andrés Manuel López Obrador prometió lo mismo. Esperemos que cumpla su promesa a partir del 1 de diciembre. La excusa de Fox fue que la cobija no alcanzaba a tapar por completo. Se jalaba de un lado y se descobijaba de otro. O sea el presupuesto era insuficiente. Ya veremos si AMLO cumple o si se disculpa porque el combate a la corrupción no generó el ahorro suficiente para instrumentar sus cambios. ¿Pero qué pasará en Sonora con ese cambio en México?

AMLO se estrenará como presidente en el mes de las fiestas navideñas y eso, a querer y no, es un verdadero distractor nacional para empezar a ejecutar sus mecanismos de acción. A partir del 15 de diciembre México entero se enfiesta y ya no quiere saber de promesas presidenciales ni de política.

En Sonora, seguramente, habrá un largo período de ajuste sin cambios importantes. Si acaso se resentirá el proyecto de austeridad republicana en cuanto a la desconcentración de dependencias federales. A Ciudad Obregón le tocaría la Secretaría de Agricultura. Y ese proyecto de concentrar todas las oficinas federales en una sola coordinación estatal. Si se instrumenta en el corto plazo, provocaría un regular desempleo que pondría a pensar a las autoridades locales.

Claro, habría otra comunicación institucional y política.

Y aquí es donde la gobernadora deberá reunir a otro equipo de colaboradores, al menos con afinidad y buena relación con los hombres del nuevo poder nacional.

Pero en el contexto general le podría ir mejor a Claudia Pavlovich con AMLO que con Enrique Peña Nieto.

A Eduardo Bours le fue excelente con Felipe Calderón.

Hoy podría repetirse la historia.

Una pieza fundamental para Claudia será nombrar a un buen enlace con Célida López y el resto de nuevas autoridades de extracción morenista. Hermosillo y el resto de los municipios no debe verse afectado por disputas ideológicas. Si los gobiernos estatal y municipales de diferente ideología reman en la misma dirección, será benéfico para todas y todos, principalmente para la población.

Otro de los cambios que veremos en Sonora será sin duda la disputa por el control del SNTE. Elba Esther Gordillo, aliada de AMLO en campaña, quiere ser de nuevo La Jefa.

Este pleito que viene podría afectar la tranquilidad en el magisterio y por ende en la obligación de las autoridades en ofrecer educación a toda la niñez y juventud sonorense.

Aquí podríamos ver el resurgimiento de Oscar Manuel Madero, ex dirigente de la Sección 54 del SNTE, quien se la jugó con su querida maestra. En su tiempo de hombre fuerte en la organización de los maestros estatales, el ex futbolista que estuvo cerca de convertirse en profesional de la patada, estaba dentro del círculo íntimo de la maestra Gordillo. Era, de acuerdo a los conocedores del tema de esa época, uno de los cinco consentidos de La Jefa.

De los maestros federales poco se sabe. Su gris líder está a punto de dejar el cargo. Ahorita debe estar preparando su sucesión, pero el triunfo electoral de AMLO le debió haber cambiado sus planes. Javier Duarte está a las órdenes de los líderes nacionales, esos que seguramente serán relevados por gente de la maestra, que tomaría el control de la organización sin estar ella, nominalmente, al frente. Suponemos que a Manolo Madero se le abre una muy buena oportunidad en el escenario nacional.

Por lo demás, mucho desempleado y pocas plazas para ocupar.

Pero así es la rueda de la fortuna política.

Ni hablar.