El pasado 4 de Julio se realizó un mitin más de los sindicalizados del ISSSTESON agremiados el SUEISSSTESON (porqué hay 2 sindicatos más en el Instituto) dónde su Líder, el Lic. Manuel Moreno Quijada, informó que iniciaron las negociaciones con las autoridades y la secretaria de gobierno, y que las autoridades les solicitaron de buena fe que se quitaran el distintivo de huelga que vienen portando desde el inicio de la semana, a lo que los sindicalizados ruidosamente le contestaron que NO, que seguirán trabajando con dicho distintivo.

En dicho mitin algunos agremiados sindicalizados expresaron su malestar ante las autoridades como lo expresó la Dra. Ríos con una trayectoria de 20 años de servicio exclusivos al ISSSTESON (así lo aseguró) reprochó que el gobierno de este sexenio haya dejado caer tan descaradamente el servicio médico hospitalario así como las instalaciones conocidas como el Hospital Chávez, que más específicamente en todos sus años de carrera en el Instituto no había visto tanto cinismo y desapego como lo son estos dos últimos años, dónde responsabiliza tanto al Director Pedro Ángel Contreras, “cómo a su enemigo, antes amigo” el Dr. Luis Becerra. 

Y no es de extrañarse que el ahora estéticamente grácil galeno tenga conductas desinteresadas a su profesión y más enfocadas a sus necesidades personales. Varios escándalos le han sido ventilados por este medio, desde sus conductas “misóginas” como su incapacidad como funcionario público, actividades que le han generado enemistades (que se expresan cada vez más en público) pero jamás un problema laboral. Si tanto problema y “suciedad” sale a la luz pública cada vez que se menciona a su nombre, ¿Por qué el Dr. Luis Becerra sigue tan campante y sin mortificaciones?; Pues Dios bendiga a sus relaciones políticas que desde la oficina más refrigerada del Estado que lo protegen.

En política todo es negociable, para desgracia del pueblo, pero existen límites. Límites que son ignorados por los protectores del Dr. Luis Becerra, ya que tanto los escándalos de los que fue protagonista cuando era funcionario de la Secretaría de Salud, como los que actualmente encabeza no acongojan en lo más mínimo al Mtro. Contreras ni a la Gobernadora Lic. Claudia Pavlovich.

A pesar del “inmaculado” curriculum que le elaboran en el directorio de los funcionarios de Gobierno (http://directorio.sonora.gob.mx/search/13821/detail) es evidente la falta de profesionalismo y la incapacidad de resolver problemas de carácter de urgente como lo son las condiciones del Hospital Chávez, La falta de medicamento no sólo en las farmacias, sino en el interior del Hospital y área de Urgencias, la falta de personal médico, las condiciones insalubres con las que tienen que trabajar la mayoría del personal del hospital. Claro, los trabajadores y pacientes del hospital deben de comprender que existen cosas prioritarias para el Dr. Becerra, cómo su apariencia, sus viajes, el apoyar a su director en la compra millonaria de softwares no funcionales en lugar de medicamentos, y una singularidad de acciones no sustantivas a su cargo.

Que tristeza e impotencia deben de sentir todos aquellos trabajadores y usuarios del servicio de ISSSTESON que ya se han dado cuenta que utilizan el ISSSTESON como refugio de funcionarios ineptos, irresponsables y sin valor moral alguno; si a las personas que no somos beneficiarios de dicho servicio nos avergüenza las situaciones que un sindicato ha ventilado valientemente, es entendible la molestia e impotencia que una base trabajadora de ISSSTESON siente, tanto que decidieron no quitarse el distintivo de huelga para demostrar su desaprobación hacia esta administración; distintivo que representa el laboral bajo protesta y que obviamente molesta tanto a las autoridades del Instituto como a la mayoría de funcionarios en el Gobierno.

Las autoridades pueden seguir haciéndose de la vista gorda, Palacio de Gobierno fingir que todo lo que sucede es para desprestigiar, pero no debe de olvidar que son las personas como del Dr. Becerra las que alimentan ese descontento con los gobiernos y el pueblo puede expresarlo no sólo en las calles, sino también en las urnas.