El Presidente Andrés Manuel López Obrador tendrá que reorientar su política frente al tema de las concesiones carreteras en el país.

2019
El Presidente Andrés Manuel López Obrador tendrá que reorientar su política frente al tema de las concesiones carreteras en el país.
     

Es lamentable lo que declaró apenas hace unas horas en el sentido de que avala los aumentos a las tarifas de peaje implementadas por CAPUFE justificando dicha acción en el aumento de la inflación.

Sin embargo el Presidente sabe que los concesionarios solo le retribuyen al gobierno federal el 000.5% de lo que recaudan en las casetas de cobro lo que significa un enriquecimiento desmedido y fuera de toda proporción para un grupo de concesionarios a costillas de miles de automóvilistas.

Pero la cosa no termina en el enriquecimiento desmedido de unos cuantos sino que además incumplen sus obligaciones de dar mantenimiento mayor y menor a los tramos carreteros que tienen concesionados y el un esquena perverso, corrupto y criminal, los diputados y senadores les aprueban miles de millones de pesos del presupuesto público para que reparen las carreteras y autopistas concesionadas siendo que esa debería de ser una de sus principales obligaciones.

El problema de la corrupción y saqueo de recursos públicos en el tema de las carreteras es igual o más grave que el "huachicoleo" de Pemex ya que prácticamente toda la red carretera en el país está concesionada a estos empresarios particulares que no tienen llenadera y no justifican los aumentos en el peaje pues no invierten un solo peso en las propias autopistas a su cargo.

El que el Presidente avale esta política significa que no está combatiendo la corrupción o que solo lo hace en algunas cosas y en otras no y para el caso pues es lo mismo que no enfrentar y resolver este grave problema de fondo al otorgarle la razón a los concesionarios para que sigan con el saqueo y fraude a miles tal vez millones de usuarios.

México es el país más caro del mundo para viajar por carretera sin agregar la inseguridad y las pésimas condiciones de la mayoría de las vías de comunicación además de la molestia de infinidad de retenes por parte de diferentes cuerpos de seguridad pública que en realidad se dedican a EXTORSIINAR a los automovilistas.

Con estas políticas que afectan gravemente a millones de usuarios en las carreteras y que encarecen los productos y servicios no vemos cómo se vaya a lograr la Cuarta Transformación del país.