Presuntos operadores de la Plaza como del brazo armado del Cártel de Sinaloa se disputan el territorio de Sonora y a ellos son atribuidos los narcomensajes que involucran a las autoridades
No es la primera vez que el nombre de Aceves Sauceda figura en este tipo de textos relacionados con la delincuencia organizada. En 2019, cuando ya era regidor, apareció la narcomanta inicial y en 2020 sucedió en dos ocasiones. Hace dos años le asignaron un par de escoltas que después dejó porque, aseguró, no tenía qué temer.
“Vieron dónde me manejaba, con quien eran mis relaciones y hasta ellos se sorprendieron de por qué pondrían mantas”, comentó.
En esta ocasión dos agentes de seguridad lo volverán a resguardar luego de presentar su cuarta denuncia por las amenazas en que se añaden a sus familiares. Pero a diferencia de las advertencias anteriores, los alcances a sus cercanos le hacen esperar ataques de cualquier parte.
“He sido una persona que todo el tiempo ha golpeado con verdad las cosas, investigo y digo tenga quién tenga quien ser, yo creo que ese ha sido el problema que me está ocasionando esto por hacerlo directo, por ser transparente”, explicó.
La inseguridad en Guaymas sigue y las narcomantas registradas en el municipio en los últimos dos meses han sido en relación al atentado del Palacio Municipal del pasado 25 de noviembre.
En aquella ocasión, un sicario del grupo criminal la Plaza intentaba ejecutar al excomisario de Seguridad, Humberto Cano Ahuir, pero el agresor cayó abatido y en la balacera también fueron asesinados un escolta de la alcaldesa, así como Marisol Cuadras, joven que se manifestaba de manera pacífica con su colectiva Feministas del Mar.
Tanto operadores del Cártel de Sinaloa, así como células vinculadas con familiares de Rafael Caro Quintero y la Plaza se disputan el territorio. A estas facciones son atribuidas las narcomantas localizadas en Guaymas y municipios aledaños. La Fiscalía de Sonora acude al sitio, toma conocimiento y abre la carpeta de investigación, aunque se mencione a las mismas autoridades.
Aceves Sauceda aseguró que pese al anuncio de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, no se han desplegado los agentes para reforzar la región, de ahí que continúen secuestros, extorsiones y personas ejecutadas. Ahora que lo han vuelto a amenazar recordó que en la administración pasada asesinaron a un contralor y agentes de policía.
Tan solo el 16 de enero pasado fueron acribillados un agente municipal y su familiar, quien se desempeñaba como custodio del penal establecido en Guaymas. Eran Luis Alfonso Villalobos, empleado del Cereso, y su sobrino Amalio Villalobos Sainz, quienes circulaban a bordo de un Chevrolet Cavalier gris.
Luego del ataque el 25 de noviembre, las autoridades anunciaron 11 detenidos, así como cuatro más que fueron arrestados recientemente y también estarían vinculados. María Dolores Del Río Sánchez, secretaria de Seguridad Pública de Sonora, dijo a este medio que enviarían a más de 200 agentes.
“¿Dónde están esos elementos?, me gustaría que la secretaria me echara una llamada y me comentara lo que me comentas para yo como servidor público, decirle ¿dónde están esos elementos?”, reprochó sobre la falta de Seguridad.
Guaymas me da tristeza, estamos viviendo una situación muy lamentable, es muy triste que sea un puerto donde está la cuarta zona naval y todos los días haya ejecutados, es muy triste donde está el cuarto batallón de Empalme y todos los días hay ejecutadosConsultada al respecto por Infobae Néxico, la Secretaría de Seguridad indicó que mantienen un operativo permanente en el corredor Cajeme-Guaymas-Empalme de la Policía Estatal en coordinación con las fuerzas municipales y federales. Eso incluye a elementos de la Marina y la Guardia Nacional, además del Ejército.
Esta mañana, cuando se había levantado para trabajar, Jesús Iván Aceves Sauceda recibió mensajes sobre las narcomantas. Enseguida se comunicó la alcaldesa Karla Córdova para preguntar cómo se encontraba y le sugirieron que denunciara, algo que realizó sin tener certeza de quienes serían los autores de las nuevas amenazas, pues afirma que no tiene enemigos.