A través de un comunicado de prensa el cofundador del Cártel de Sinaloa confirmó que sí fue emboscado para ser aprehendido
La misiva que consta de dos cuartillas, incluye una cronología de cómo sucedieron los hechos, todo Contado a través de ‘El Mayo’ Zambada y quien remarca que, desde que fue llevado al país gobernado por Joe Biden el pasado jueves 25 de julio, ha habido “informes inexactos”, por lo cual él se ve orillado a declarar lo que verdaderamente sucedió en el marco de su detención.
“Llegué un poco temprano. Vi un gran número de hombres armados con uniformes verdes que supuse eran sicarios de Joaquín Guzmán y sus hermanos. Estaba acompañado por cuatro elementos de seguridad, dos de los cuales se quedaron fuera del perímetro. Los dos que ingresaron conmigo fueron José Rosario Heras López, comandante de la policía judicial del estado de Sinaloa, y Rodolfo Chaidez, un miembro antiguo de mi equipo de seguridad”.
El relato del capo mexicano continúa con que, mientras avanzaba hasta un punto donde se llevaría a cabo la reunión, ubicó a Héctor Melesio Cuén Ojeda, quien estaba acompañado de uno de sus asistentes, acto seguido, ingreso a una habitación donde se encontraba ‘El Güero Moreno’ -”a quien conozco desde que era un niño”, remarca- y quien, al ver que ‘El Mayo’ había llegado, le indicó con la mano que podía ingresar.
El relato continúa con que una vez que ingresó a la habitación antes citada, fue emboscado por un grupo de hombres que le colocaron un pasamontañas en la cara para después maniatarlo.
“Luego me forzaron a subir a la parte trasera de una camioneta. Durante todo este calvario, fui sometido a abusos físicos que resultaron en lesiones significativas en mi espalda, rodilla y muñecas. Luego me llevaron a una pista de aterrizaje a unos 20 o 25 minutos de distancia, donde me obligaron a subir a un avión privado”.
Mientras ‘El Mayo’ Zambada continúa su relato respecto a cómo sucedieron los hechos, aclara que en el avión que lo llevó a Texas y donde se tomaron las fotografías difundidas por el Gobierno de México, no viajaba nadie más. Más adelante, remarca que al momento, es de su conocimiento todo lo que se ha dicho al respecto, incluyendo el asesinato de Héctor Cuén quien remarca, fue ultimado en el mismo sitio donde sucedió la detención y no fue con el fin de robarle su camioneta, como previamente se mencionó.
Al momento, ni el Gobierno de Estados Unidos ni el de México, es decir, federal o estatal refiriéndonos a Rubén Rocha, se han pronunciado al respecto.