Bisturí. Gobierno-Familia

2016
Bisturí. Gobierno-Familia
     

En la recta final del gobierno padrecista se registró la separación de una pareja. Era un divorcio normal, de estira y afloja entre los directamente involucrados. En esa etapa, los familiares de la dama afectada recurrieron a medidas de presión en la Procuraduría General de Justicia del Estado. Uno de sus funcionarios realizó labores de vigilancia y acoso contra el hombre que demandaba la separación conyugal. 
Con esa acción lo normal desaparecía. 
Pero sucede que en la actual administración este caso ya se convirtió en asunto de gobierno. El término normalidad ya fue rebasado para plantearse una pregunta: ¿Por qué este asunto adquiere tanta rele-vancia? 
El nombre de la dama en cuestión es hermana del actual subsecreta-rio de Salud, Luis Becerra Hurtado. Y el hombre en proceso de divorcio es Pok León, un conocido empresario restaurantero que tiene como hobby el periodismo: Edita un medio impreso, El Acabose, que complementa con un portal informativo del mismo nombre. En esos medios ha atacado al hoy funcionario, quien al parecer pidió el apoyo de algu-nos compañeros de gabinete. 
Becerra y León, de familiares unidos (al parecer el empresario cubrió gastos de la carrera de medicina del actual funcionario estatal) pasaron a ser enemi-gos irreconciliables. De acuerdo a comentarios de Pok León, Luis Becerra ha-bría ordenado su detención. El empresario restaurantero y periodístico fue sa-cado en vilo de su hogar por policías. Y desde entonces El Acabose se fue a la yugular del funcionario. 
Hasta entonces era un pleito entre particulares. 
Pero recientemente el asunto fue trasladado a esferas de gobierno, en una ad-ministración empeñada en recuperar credibilidad ciudadana. 
Ignoramos cuánto poder político ejerce el subsecretario de Salud, pero el número dos del actual gobierno, Miguel Pompa, tomó en sus manos el pleito fa-miliar para convertirlo en un asunto de Estado. 
¿Por qué? Quién sabe. 
Pero entre los que conocen esta historia se repite otra pregunta: 
¿La gobernadora está enterada de este pleito familiar que trasladaron al ejer-cicio de gobierno? Conocemos al menos un caso en que Miguel Pompa reclamó a un periodista con ligas de amistad con Pok León. 
El diálogo habría sido más o menos así: -Yo ya no trabajo para Pok- aclaró el periodista. -Pero trabajaste. Y estás de ese lado- atajó el secretario de Gobierno. 
Posteriormente algunos funcionarios que tenían tratos con ese periodista se desmarcaron de esa relación, argumentado que no querían problemas. 
Y todo hace indicar que los periodistas que tienen o tuvieron alguna relación de amistad con Pok León (entre los que se cuenta el suscrito) están considera-do como proscritos del actual régimen. 
¿Por qué? Si buscamos por el lado político, tenemos que Pok León es compadre del pa-nista Francisco Bueno Ayup, ex director de Alcoholes en el Nuevo Sonora, ac-tualmente con residencia en Querétaro. El otro compadre en este caso es el co-nocido senador Ernesto Cordero, del grupo del ex presidente Felipe Calderón y un aliado de Margarita Zavala en sus aspiraciones de convertirse en candi-data presidencial por el PAN. 
¿Estos antecedentes tienen qué ver en el pleito familia-gobierno que vendió Luis Becerra y le compró Miguel Pompa? 
Lo dudamos. Luce muy ajeno a Sonora. Hicimos la lucha por averiguar las causas de este caso con un asesor de la go-bernadora, pero como respuesta sólo hubo silencio. 
A Pok León le hicimos la misma pregunta y su contestación ya la esperábamos: No tengo ni idea de lo que está pasando, respondió el empresario. 
Hay otro antecedente que pudiera estar ligado a la actual historia: Pok León tuvo un pleito jurídico con Jaime Lucas "El Pechín" Romo Pavlovich, emparen-tado con la actual gobernadora. 
Pero también dudamos que este antecedente sea una de las causas de este en-redo, ya que Claudia separa muy bien las relaciones familia-gobierno. Y en su lucha contra la corrupción no hay lugar para esta clase de pleitos domésticos. 
Además, la gobernadora ya tiene un pie dentro de las ligas mayores de la polí-tica nacional. Y obviamente no echaría por la borda su imagen, que construye día a día con esfuerzo, por un pleito de familia de uno de sus subalternos. 
Mientras, entre otros funcionarios hay un constante reclamo por los panistas que aún conservan sus puestos de gobierno. Estos cabrones ya tienen que salir, comentaba una aguerrida funcionaria. 
Y un conocido prüsta terció en la plática. Mira, me lo informó una fuente con-fiable: A mediados de enero pasado se reunieron en San Pedro entre 130 y 140 panistas que dejó el padrecismo, mandos medios en el actual gobierno, para afinar estrategias y seguir en sus funciones. 
Pero el secretario de Gobierno no se ocupa de estos detalles. Le da prioridad a un pleito familiar del subsecretario de Salud.