El hombre de 71 años acusado de matar de un balazo en el tórax a uno de los cinco delincuentes que el viernes pasado ingresaron a robar a su casa del partido bonaerense de Quilmes, fue beneficiado este lunes con un arresto domiciliario, informó a la agencia de noticias Télam uno de sus abogados defensores, Hugo Icazati.
2020-07-22
Le dieron prisión domiciliaria al jubilado que mató a un ladrón que entró a robar a su casa
El hombre de 71 años acusado de matar de un balazo en el tórax a uno de los cinco delincuentes que el viernes pasado ingresaron a robar a su casa del partido bonaerense de Quilmes, fue beneficiado este lunes con un arresto domiciliario, informó a la agencia de noticias Télam uno de sus abogados defensores, Hugo Icazati.
La Justicia de Argentina le otorgó prisión domiciliaria a un hombre de 71 años, detenido luego de matar a tiros a uno de los delincuentes que lo asaltaron y golpearon en su casa, en la localidad de Quilmes.
Jorge Adolfo Ríos, padece una serie de problemas de salud, por lo que se determinó que estará en prisión domiciliaria después de ser imputado por "homicidio agravado por el uso de arma de fuego".
Los hechos ocurrieron el viernes pasado cuando el herrero jubilado, fue asaltado y golpeado por tres delincuentes que entraron a su casa, mientras que otros dos quedaron en los alrededores cumpliendo el rol de "campanas".
A pesar de las difíciles circunstancias, Ríos pudo hacerse de una pistola calibre 9 milímetros, de la que se valió para poner en fuga a los intrusos.
Uno de los ladrones, identificado como Franco de 26 años, salió rengueando de la casa y a los pocos metros se sentó en la vereda, donde el jubilado lo alcanzó y le propinó un disparo.
Las acciones quedaron registradas en cámaras de seguridad emplazadas en propiedades aledañas a la de Ríos, en Ayolas al 2.700.
El hombre quedó detenido en primer lugar por "exceso en la legítima defensa". Horas después el fiscal Ariel Rivas, que entiende en el caso, decidió agravar la acusación. Mientras tanto el acusado se negó a declarar.
Posteriormente Rivas y el juez de Garantías de Quilmes Martín Nolfi decidieron concederle al imputado la prisión domiciliaria para preservar su salud; además de presentar lesiones provocadas por los ladrones, sufre de EPOC y tiene un sólo riñón, entre otras afecciones.
De acuerdo a la información los investigadores no tendrían dudas que Ríos actuó en legítima defensa en el interior de su casa; sin embargo se centran en lo que pasó en el momento en el que le disparó a Moreyra, fuera de su propiedad, ante las sospechas de que le disparó cuando el ladrón se encontraba indefenso.
El arresto y la imputación contra Ríos provocaron la indignación de familiares y vecinos, que consideraron totalmente injusta la situación.
Al conocerse el caso la sociedad argentina también se mostró indignada con la resolución del juez.
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